El niño que da vueltas alrededor del sol

 Este fin de semana con la ayuda de Marty y Doc nos dimos una vueltecilla (o más de una) por el pasado, y soñamos futuros. Y allí, sentada ante los mandos de un Delorean imaginario, recordé una historia...

A Gastón le encantan mis historias... Ahí va...


Marty y Doc
Marty y Doc


La historia de un niño y un astro

Había una vez un niño que comenzó un viaje alucinante alrededor del sol hace mucho tiempo...Dicen que partió siendo muy pequeño, casi diminuto, a las 6 de la tarde de un 21 de enero de hace ya 43 años. Comenzó a volar más rápido, más lento a veces... Agarrado a la estela de un cometa, deslizándose sobre anillos planetarios... Flotando en medio de la antigravedad de las estrellas.

Yo lo conocí ya en la mitad de su vida, y nos hicimos compañeros de viaje, aventuras y desventuras. Juntos exploramos...

Exploramos planetas y universos

Juntos exploramos planetas paradójicos, algunos burbujeantes, otros más tranquilos. Unos oscuros, otros luminosos.
Juntos descubrimos universos increíbles... Comarcas habitadas por pequeños hobbits, minas tenebrosas guardadas por dragones... Desérticos kilómetros repletos de basura espacial, donde se posaban a descansar milenarios halcones... Conocimos príncipes cuidadores de delicadas rosas, ositos que cuidaban la inocencia de su niño.
Pintamos paisajes supercalifrágicos, soñando magia.

La paternidad

Al tiempo, arribamos a las Costas de la Paternidad, donde las olas de la incertidumbre, a veces casi volvían invisible aquel horizonte donde flotaban las nubes de nuestro pensamientos. Allí, en el horizonte capturamos las palabras que queríamos decirnos, armados con cazamariposas, y proseguimos camino.

Algunas plazas junto al niño se han ido quedando vacías de pequeños pasajeros que aguardan ahora en una parada de autobús al otro lado del arco iris. Otras, se han ido ocupando, individuales y múltiples, perrunas, humanas y hasta marcianas...
Ahora somos 6 los que la acompañamos, soplando juntos las velas del palo mayor de nuestra nave, soplando juntos las velas de todos los cumpleaños. Unidos con ese vínculo invisible que se teje entre las personas que se elijen mutuamente.

Los días se han ido desgranando como la pulpa jugosa de una granada, hasta hoy. Un año más. 43.

Gastón muy concentrado
Gastón totalmente escuchando totalmente concentrado




Hasta aquí la historia por ahora, Gastón. Seguiré contándote esta historia. 
Prometo que sus ojos cerrados son de pura concentración.


Comentarios

Entradas populares